martes, 16 de diciembre de 2008

domingo, 14 de diciembre de 2008

Out of Africa

Actualizo este post con todos los albumes web que ya hemos subido a Picasa.
Iréis notando cambios porque iremos cambiando fotos, añadiendo títulos y ubicaciones geográficas.







OutOfAfrica1


OutOfAfrica2


OutOfAfrica3


Que las disfrutéis

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Where is my mind?

Qué fresquito más rico hace por aquí, a pies de la Cebollera, jeje. Casi me he tenido que poner los guantes y todo alguno de estos días :D.

Bueno, como ponía el Alberth, ya @home y, al menos yo, más contento que unas castañuelas. Para rematar, el contraste, ahora mismo nieva de lo lindo en la pequeña Alaska. Como crío con zapatos nuevos, igual que allí. Yuuuuju!


Casi se me escapan unas lagrimitas al despegar de Winhoek y en el metro en Madrid volviendo a casa desde el aeropuerto. La experiencia ha sido cuando menos asombrosa, inolvidable más que seguro, y a cada momento que pasa se va dando uno más cuenta uno de ello. Una auténtica maravilla. Y eso que incluyo el haber sido sometido a un sufrimiento mental sin precedentes: Beavis & Butthead todo el día discutiendo, la GPSmanía campando a sus anchas a mi alrededor y, sobre todo, el Señor Salvaje, al que llevo toda la semama echando de menos (besote, Alber -kilomita, kilomita!). Literalmente han volado por los aires las conexiones entre mis dos hemisferios, perdí la noción de dónde había dejado algunas de mis cosas. Locura y surrealismo con mayúsculas.

Y como al rookie casi no le han dejado escribir los ultimos post (mentira cochina), enfrascados en hacerlo ellos como estaban en los aeropuertos a nuestro regreso, pues aprovecho ahora para completar el blog justo con lo único de lo que no hemos hablado todavía: Swakopmund y enderredores, que, aunque bien podría ser parte de otro tipo de viaje diferente, a mi me ha asombrado tanto como el resto.

Escribo de lo que apunté en la libreta que me regaló el Nash. Quizá algún otro rato pueda trasvasar también la crónica de alguna otra jornada, sobre todo de los días más intensos.


Vamos camino de Swakopmund. unos preferíamos ir a Sossusvlei, en el corazón del Namib donde hay dunas de hasta 125m de altura. Pero parece que es la atracción turística numero uno de Namibia, y eso es razón más que de sobra para que huyamos. No queremos unas Catarataras Victoria segunda parte.


Esperamos encontrarnos un poco de todo, costa y turismo, y poder apartarnos un poco de ello y adentrarnos también en el desierto.

El paisaje al salir de la capital está más verde que cuando llegamos hace dos semanas largas. Es una sensación que ya tuvimos ayer. Parece que la época de lluvias, que este año ha llegado con adelanto, empieza a notarse. Sin embargo, prácticamente todos los cauces de río que vamos atravesando hasta el momento están completamente secos.

Conforme nos acercamos a la costa todo resto de verdor va desapareciendo. Ahora mismo ya solo se ven apenas algunas matas dispersas, verde oscuro sobre arena. Gris sobre tierra blanca. Ya casi ni eso. Ahora sólo esa misma arena y piedras, en cientos de tonos marrones. Dunas y cañones. Faltan 20Km para Swakopmund. La temperatura, pese a ser las 2 de la tarde, ha bajado bastante. Se nota, y la influencia del mar en la humedad también.




Y llegamos a la costa. Caracter que tiene el atlantico por aquí también, el talud en la playa es bastante pronunciado. El lugar es eminentemente turístico, pero resulta bastante agradable. Es una especie de pequeño oasis en toda esta extensión inóspita del desierto. Por cierto, más alemán que Alemania, eso dicen. Damos media vuelta por un largo embarcadero de madera, nos comemos unos smitchel con nuestras cervecitas de rigor y un buen helado, y arrancamos para Walvis Bay, por la costa en busca de las famosas dunas.


El paisaje aqui, una vez más, es distinto e impresionante: a un lado el mar, al otro colinas de arena blanca. Barcos encallados y lomas enormes que apenas se distinguen por la galerna y la arena en suspensión arrastrada por el viento de la playa hacia el interior.

Walvis Bay resulta ser un lugar no muy bonito, la verdad, al menos lo que nosotros hemos visto, zona de puerto industrial. Así que, a pesar de ser la segunda ciudad del país, pasamos de ella, ya hemos visto el indicador a lo que queremos ver y nos dirigimos un poco hacia el interior.

Y ahí está! La Duna 7! Calculamos que tiene unos 60m de altura, nada comparado con los de sus primas de Sossusvlei, pero esta la tenemos casi para nosotros solitos, y es imponente. No nos lo pensamos dos veces, ya nos hemos quitado el calzado y saltamos del coche dejándolo entre un par de palmeras para encaromarnos pendiente arriba. El esfuerzo es considerable, casi es más cómodo ir apoyando al tiempo pies y manos. Después de subir por sotavento, el lado protegido del viento de la costa, quedamos al descubierto al llegar arriba, y la arena lanzada de barlovento nos azota en todo el cuerpo, se mete por todos lados.


La bajada, para alguno de nosotros necesaria, es mucho más llevadera. Sólo tienes que ir echando los piés para deslizarte facilmente mientras ves como diferentes capas y tonos de arena corren entre ellos desde tu posición a algunos metros más abajo. Una sensación guay. Nos volvemos echando leches para Swakopmund, se está haciendo tarde y todavía no sabemos donde dormiremos esta noche. Pero nos quedamos con ganas de más desierto.


Nos hemos vuelto a levantar tarde, muuuuuy tarde. No tenemos remedio. No sabemos si nos dará tiempo de hacer algo de lo que queríamos antes de volvernos, tenemos que entregar el coche a las cuatro. Hemos preguntado por el camino que queremos tomar de vuelta: 4:30h. Justito justito vamos a andar, nada de parapente ni otras historias, una de quads por el desierto y a salir cagando melodías.

Qué pasada! Un par de minutos siguiendo al tipo y ya no sabemos donde estamos. Hemos salido casi a pie de carretera, teniendo referencia perfecta de dónde está el mar, pero no vemos más que dunas y más dunas, arena. Imposible saber hacia donde estás mirando. Es como en las fotos. Todo marrones intensos, un montón de marrones contra el azul raso del cielo. Hoy no hace aire y tampoco hay casi nubes, así que nuestra visión es bien clara y distinta de la de ayer. No soy partidario de estos quads que todo lo machacan, pero la verdad es que esto es muy divertido y aqui parece que su impacto es más que mínimo. Un gustazo.

Echamos gasoil, son las 11 y media casi. A por la C28, 'very scenic road' nos han dicho. Y resulta que sí, estamos viendo todos los paisajes a la inversa que camino de la costa, Normal, claro, pero esta vez vamos atravesaremos las montañas, ascendiendo poco a poco.


La pista es muy ancha y está en bastantes buenas condiciones, al menos en esta zona. Nos han dicho que vayamos con cuidado y que no nos cruzaremos a prácticamente nadie, pero de momento esto está concurrido, será por la proximidad de las minas a cielo abierto.


Vamos viendo las primeras formaciones rocosas, abruptas pero no de mucha entidad. Lo que vemos al fondo es justo al contrario, grandes colinas redondeadas, un montón, como un paisaje de dunas pero con vegetación matorral. La carretera/pista bien de momento, llevamos un buena media.

A tomar por saco la media, la carretera aquí está hecha un cristo. Ya estamos en la zona de las famosas lomas y esto no hace más que subir, bastante por cierto. El accidente de moda es la zanja asesina en los valles entre cambio de rasante y cambio de rasante, y eso se repite cada medio kilometro. La verdad es que esto está muy chulo, pero conduciendo no hay muchos momentos para disfrutar de ello, y empezamos a ir con el culo pegado.

Momento chungo: famoso Bosua Pass, pendientes de más del 20% en pista de grava. Me he dejado caer las revoluciones del bólido y se me ha calado. Está empinado de cojones y no tenemos freno de mano, lo debímos perder junto con la matrícula delantera. El coche pesa bastante y se va para atrás sólo con pensar en levantar el pie del freno. Reductora, segunda y a pisar todos los pedales al mismo tiempo. Salimos sin demasiados problemas, pero no me gustaría repetir esta novedad más veces. Ahora en cada cuesta arriba vamos rugiendo como bestias, y aún así llegamos a coronar justitos de fuerza en muchos casos.

Estamos muy cerca de Windoek y lo de las 4 horas y media de trayecto era una verdad como un templo. De culo, vamos de culo. Hemos parado un momento para coger algo para comer de la nevera y hemos cambiado, ahora va conduciendo Alberth. Vickman a cada momento da minuto y resultado: tiempo para las 16:00, kilómetros hasta la puerta de African Tracks y tiempo estimado de llegada. El Señor Salvaje se pone a cantar y a cada nuevo parte suelta eso de kilomita, kilomita! (klilometer, kilometer!) Aahhhhhhh! Va a acabar volviéndome loco.

La 4:01 por el reloj del coche, acabamos de atravesar el verja de African Tracks. Apurando al límite pero cumpliendo siempre, jeje. Valerí nos esta esperando. Parece que está encantada con como le hemos devuelto el coche, y nosotros con que no haya sido sido puntillosa y como se ha portado el Toyota Hilux. Puestos a pedir, que tuviera un poco más de potencia, y un winch, pero nos ha ido de maravilla en toda situación.

Esta noche nos vamos a cenar al Joe's Beer House. Homenaje. Mañana inicamos la vuelta de verdad. Esto toca a su fin. Cagontó!!


("Where is my mind?" Sonrisa de oreja a oreja al escucharla en el Joe's. Aullo al compás de Frank Black al tiempo que doy cuenta de mi plato de Gemsbok. Broche de oro. Los Pixies sonando en medio de Namibia.)

martes, 9 de diciembre de 2008

Home

We are home! Buaaahhhhhhhh!

domingo, 7 de diciembre de 2008

Johannesburg

Johannesburg airport. Waiting for our plane.
Sent from my BlackBerry® wireless device

A cuestas con el "Señor Salvaje"





Viajar con una persona experimentada, documentada e ilusionada tanto como preparada aporta siempre seguridad y confianza. Si esa persona es además tu hermano o tu primo, la sensación puede duplicarse o triplicarse. Pero cuando esa persona se convierte en un "engendro" autodenominado "El Señor Salvaje" empiezas a preocuparte. No dejas de preguntarte si demasiadas horas de documentales "en vena" pueden tener efectos perjudiciales sobre la salud mental. Añadamos a esa sensación algunos comportamientos "maníaco-compulsivos" y las dudas pasarán a ser "riesgos".Más de una vez me hubiera gustado grabar sonidos en vez de hacer fotos para que pudiérais haber tenido documentos palpables de lo que hemos tenido que "sufrir/disfrutar" junto al señor salvaje, aunque creo que a muchos os va tocar sufrir las consecuencias estas Navidades. Id apuntando estas frases para que no os pillen desprevenidos:

"This is gonna be very dangerous. Specially for the jackals"
"I've just seen a lion!!. It was lying on the side of the road"
"Winduuuuuuuk, nananananaaaaa naaaa" (acompáñese de la música de Memorias de África)"
"Carnage !!!"
"Kilometa kilometa"
"Para para!, echa patrás que he visto algo que parece....¡un árbol!"
"Queréis action, queréis action?"
"Espera que me bajo y me haces una foto."
"Naaash, Naaash"

Estáis avisados.

FOXTROPS








sábado, 6 de diciembre de 2008

Resumiendo que es gerundio









Etapas Rundu-Divundu-Caprivi-Kasane.
Desde Rundu tomamos la carretera que corre junto al rio Okavango, que tiene una orilla en Namibia y la otra en Angola, por una carretra asfaltadalimitada a 80 Km/h por cruce de elefantes. Mala suerte, nosotros no vimos ni uno solo.
Llegamos asi hasta el enclave de Divundu donde el Okavango gira decididamente hacia el Sur hacia su propio delta, y donde nuestra ruta cruza el rio haciala franja del Caprivi, un largo y estrecho apendice de Namibia que se adentra entre Angola y Botswana. Aquí nos alojamos en el Nunda Lodge, probablemente elalojamiento mas delicioso de todos cuantos hemos visitado. Con una gran terraza sobre el Okavango, alli vimos a los hipopotamos a sus anchas, y los carteles de "DANGER" del propio lodge junto a la orilla anunciaban tambien la presencia de cocodrilos, aunque a estos tampoco los vimos. Al dia siguiente cruzamos el Okavnago para recorrer la franja del Caprivi hacia Kasane, la puerta de entrada a Cataratas Victoria entre Zambia yZimbawe.
En su momento esta franja fue un peligroso viaje por la presencia de la guerrilla angoleña, pero ahora parece que las cosas estan mas tranquilas.En Ngoma bridge dejamos Namibia para entrar en Botswana, y tras los corresponientes controles y desinfecciones por la epidemia de "foot and mouth disease", iniciamos el tramo final a Kasane a lo largo del limite del Chobe Game Reserve, una de las reservas mas espectaculares de Botswana y nuestro destino dias mas tarde.
Kasane es el topico de ciudad fronteriza insegura y sin atractivo en si misma, pero guarda algunas perlas como sedudu island, una isla en el rio Zambezi conmucha vida animal, donde por fin, vimos cocodrilos. La visita del dia siguiente a Cataratas Victoria fue mas o menos lo que esperabamos. La hicimos con un transporte contratado para evitar los problemas fronterizos con coche particular. El lugar se debe conocer, y tiene un gran atractivo como entorno natural, pero el ambiente de "a por el bolsillo del turista" te hace huir de alli rapidamente, asi que a mediodia estabamos de vuelta en Kasane.
Etapa Kasane-Savute
Salimos de Kasane para ingresar en la reserva del Chobe. Sin embargo cuando comunicamos al ranger nuestras intenciones de cruzarlo por el centro de nortea sur, su contestacion no pudo ser mas contundente: el parque estaba muy inundado, y si nos atascabamos alli, nadie podria ayudarnos, "you will die in thebush" dijo (morireis en el bosque). Nos convencio rapidamente de tomar la ruta periferica mucho mas transitada. Savute es un lugar peculiar. Acampar alla es como dormir en un zoologico en el que todas las jaulas de los animales estan abiertas. No tranquiliza nada ver que el lodge de la gente pudiente esta fortificado con una valla de gruesos troncos y alambre electrico, y tu duemes fuera. Según la guia Lonely Planet hace unos años este campamento fue arrasado por elefantes sedientos. Total, mala noche. Despues de todo Savute nos guardaba la mejor sorpresa del viaje: el esquivo leopardo se nos mostro por unos instantes que parecieron un sueño (y que aun ahora nos lo parece).
La siguiente jornada nos llevo hacia el sur, a la reserva de Moremi, por fin, el delta del rio Okavango. Aquí empezaron nuestras autenticas dificultades de desplazamiento. Las lluvias se han adelantado y el camino esta lleno, no de charcos, sino de piscinas (a veces casi lagos) de barro. Al cruzarlos a menudo el agua-barro pasa por encima del capo, y hace falta toda la destreza del mundo para no atascar.Al final en uno de ellos nos metimos hasta el tuetano. Gracias a Dios en ese momento formabamos convoy con unos alemanes que tiraron de nosotros para sacarnos del atolladero (cada vez que bajas del coche no hay que olvidar que hay leones sueltos por alli). Con mucho mas barro, pero ya sin atascones, y después de cruzarnos por fin con varias manadas de elefantes, llegamos a sakanaka, un campamento a la misma orilla de una de las ramificaciones del delta. Alli tambien hay lodge para ricachones fortificado y con alambre electrico.Preguntamos a la familia que alli vive por los paseos en barca (de los que ellos viven). De paso preguntamos si se acercaban animales por la noche (porel tema de la valla jurasica), y la mujer nos contesto que las hienas y los hipopotamos venian cada noche, y que los leones o los elefantes a veces. No es peligroso? Fue nuestra siguiente inquietud. Con media sonrisa contesto que no salieramos de la tienda bajo ningun concepto y si los oiamos fuera, que no nos movieramos o hicieramos ruido. No se si eso fue un consuelo, teniendo en cuenta que solo te separa de ellos un trozo de tela. Ese dia yo dormi en el coche. Acabamos el dia compartiendo una buena hoguera con los alemanes.
Siguiente etapa: third bridge.
Antes de partir a nuestro siguiente campamento en el Okavango, hablamos con unos sudafricanos que habian estado alli. Nos dijeron que alli habia unafamilia de entre 12 y 14 leones. No sabiamos si alegrarnos o no: queriamos ver leones, pero por la noche los preferiamos lejos del campamento. Finalmente Third Bridge fue un campamento delicioso y no hubo rastro de leones, ni de noche ni de dia. Donde estaban los abundantisimos leones deBotswana?? Aun asi vimos muchos animales, el delta del Okavango hierve de ellos. Unas jirafas estaban junto al mismo campamento, y desgraciadamente los babuinostambien. Son unos monos peligrosos, que roban lo que pillan a la menor ocasión. Un macho grande llego a meterse dentro de la tienda de unosestudiantes alemanes, cuando uno de ellos estaba dentro!!
Al dia siguiente salimos de la reserva de Moremi hacia Maun, la capital del delta. Despues de muchos dias tuvimos una buena cena, una ducha y descanso.Antes de abandonar Maun contratamos un vuelo sobre el delta del Okavango, que fue como un resumen maravilloso de toddo lo que habiamos vivido dias atrás.La vista aerea del delta es de una plasticidad indescriptible, y hasta desde 200 metros de altura se ve hervir la vida en cada uno de sus canales, islas ypastos. Nuestro siguiente destino era la ultima reserva de vida salvaje y la mas extensa de todo Africa: Central Kalahari, el hogar del Guepardo o Cheetah, elmamifero mas rapido sobre la faz de la tierra.
Central Kalahari.
Nuestra idea era que el Kalahari es un desierto, pero no lo es al estilo topico del desierto de dunas.Alli hay vegetacion, y a veces muy verde. Lo peor son los desplazamientos: enormes distancias sobre caminos de arena quehacen al conductor luchar sin tregua con el coche, para mantenerlo en la via. Nuestro primer campamento en el Kalahari fue uno de los mas bonitos de todo elviaje, y por primera vez estuvimos totalmente solos.
Al dia siguiente, Africa nos reservaba una ultima sorpresa: tras muchas horas y muchos dias de escudriñar el horizonte con los prismaticos, una figuraesbelta de largas patas, cuello corto y cabeza pequeña, se dibujaba a la sombra de un arbol.No pudimos resistir la tentacion y rompimos una norma del parque. Salimos del camino para aproximarnos al arbol, y alli se mostraron tres jovenesguepardos, espectaculares, elegantes, como un sueño...
La ultima noche en el Kalahari tenia aire de resumen. En el campamento de Xana se acababa nuestro periplo por las reservas de vida salvaje de Africa Austral.Por la mañana una ultima lucha contra el coche de 70 Km de arena infame nos llevo por caminos cada vez mejores y finalmente carretera hasta la fronteraentre Botswana y Namibia.
Volvemos a la Civilizacion.
The kavra ...

We are alive!

Estamos vivos. Todo ha sido muy intenso, casi demasiado. Hemos estado incomunicados casi todo el tiempo, Africa sigue siendo muy muy salvaje. Dentro de un rato empezaremos a postear fotos y relatos que tenemos escritos pero que no hemos podido subir antes.